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Discurso
Sr. MIGUEL RODRIGUEZ

Sr. Embajador Mauro Vieira
Sra. Ministra Maria Teresa Lazaro
Miembros del panel
Señoras y señores

Me toca a mi desarrollar los beneficios que la integración a través del MERCOSUR va a traer a la sociedad civil, cuales son esas mejores condiciones de vida para los habitantes de MERCOSUR y cual es la percepción que se tiene hoy desde los que fueron los declamados objetivos de MERCOSUR y como se está recibiendo esto a nivel de los individuos concretos.

A través del Instituto Jurídico Modelo, estamos llevando a cabo desde 1997 una serie de acciones, convencidos de que esta integración es beneficiosa para la región.

El problema que se presenta en esta percepción de los inconvenientes, es que la que la sociedad civil a nivel de sus individuos, entiende que la diversidad y la diferencia no los integra no se reconoce.

Lo que vamos a ver e, s como es posible, a través de la participación, que esto se logre.

Nuestra convicción por las experiencias de estas reuniones anuales y del trabajo en conjunto con empresas PYMES, algunos micro emprendimientos y otras empresas de mayor importancia, nos indican que los resultados, estas percepciones son diversas. Dependen de las personas, dependen de la situación y de su nivel de participación en el proyecto general.

Recordemos que MERCOSUR nace como defensa propia de los estados de esta zona del planeta. La globalización a través de la comercialización, el comercio internacional y su crecimiento, demuestra que es necesaria la unión, aprovechar la competencia de cada uno de los países, que lógicamente son diferentes para poder competir en  este nuevo escenario mundial.

Este promover acciones conjuntas que reconozcan las capacidades diferentes capacidades que se encuentran en los Estados, mejoran las posibilidades de nuestra región frente al mundo.

Por cierto que no es MERCOSUR el primer intento de unificación de esta región. Podemos decir que desde las luchas por nuestra independencia hubo muchísimos intentos para tratar de unificar la actitud y el comportamiento de estos países frente al mundo.

Por supuesto la divisiones, muchas de ellas externas, se aplicaron sobre lo que eran los criterios de unión de nuestros países y lograron estas ficciones de división en países, de no reconocimiento de algunas unidades preexistentes, algunas etnias preexistentes y agudizaron estas contradicciones.

MERCOSUR impacta con mucha fuerza sobre este escenario, y en el sentido inverso. MERCOSUR promueve la integración, por ahora si incluimos a Chile y Bolivia, de aproximadamente 260 millones de habitantes.

Pero MERCOSUR, además se define como el núcleo duro desde el cual pretendemos integrar a Sudamérica (400 millones de habitantes). Ya nuestro peso específico como mercado potencial como creador de riqueza y sobretodo teniendo en cuenta las capacidades individuales y la proyección que podemos darnos, es absolutamente diferente.

Pero para esto debemos asimilar el criterio de que estamos generando una autoridad superior. Los estados que forman parte de MERCOSUR, cuando deciden su conformación lo hacen de una manera centralizada, a través de los presidentes de estado porque son las únicas autoridades políticas que pueden ceder soberanía a una institución de rango superior. Y esto lo debemos ir asimilando, y la única forma de asimilarlo es participando.

Durante muchos años hemos estado dándonos las espaldas en la región, hemos tenido conflictos que han sido generados por diferencias de ideas, algunos de ellos han sido motorizados desde el exterior con el objeto de dividirnos. Hemos tenido un trato discriminatorio entre los países, y con los habitantes de estos países, y ahora, la propuesta es absolutamente diferente.

Pero esto no puede lograrse si no hay un reconocimiento del individuo. Recién dije 260 millones, pero en realidad estos 260 millones no son un colectivo homogéneo. Hay 160 millones de brasileros, hay 40 millones de argentinos, que tenemos culturas, patrones culturales diferentes, accionar diferente, una visión diferente. Y debemos encontrar la forma de superar estas diferencias con un bien superior, con una visión superadora de estas diferencias. Esto no significa desconocerlas, no se desconocieron desde la creación de MERCOSUR.

MERCOSUR se crea desde esta centralidad, porque era la única forma posible, la voluntad política de cuatro presidentes que dicen voy a ceder soberanía y que posteriormente, al interior de sus países, empiezan a bajar en la estructura política, las responsabilidades para que esto se concrete.

Se ha avanzado muchísimo en el tema y estamos ya tocando la base de esta pirámide. Los que somos de alguna manera los beneficiarios de esta acción concreta, si da resultado. Pero también somos los responsables de que esto funcione.

MERCOSUR tiene dos componentes: uno es el componente económico, la creación de un Mercado Común, la actividad económica de las empresas. Ya hemos escuchado de boca de quienes me precedieron cuales son algunas de esas implicancias. Y la otra y fundamental es que esto se hace para mejorar el nivel de vida de los habitantes de esta región.

Que no podemos definirnos todavía como “mercosureños” pero debemos apuntar a eso, debemos dejar de ser argentinos, brasileros, uruguayos, paraguayos, para convertirnos en ciudadanos de una entidad superior. Esto no significa perder la identidad, todo lo contrario, debemos respetar la identidad, debemos valorar la identidad, porque desde esos valores, desde ese reconocimiento de identidad, el aporte que podemos hacer es mucho mas creativo, mucho más valorable, tiene sentido.

MERCOSUR si se limita exclusivamente a lo que es la faz comercial, la integración de empresas, podría llegar a ser un programa, un proceso de concentración económica y si eso no es percibido por la sociedad civil como beneficioso ese proceso es falible, no vamos a tener la voluntad ni el interés de que esto prospere.

Y tenemos muchísimas razones por las cuales podemos confiar de que esta propuesta de superación se vaya a concretar porque se esta concretando. Por que estamos reconociendo, por ejemplo que la industria turística nos ha definido una unidad, una región interior, que no era tenida en cuenta por ejemplo chilenos y argentinos: “Patagonia Austral”. El mundo no mira a patagonia como “patagonia chilena” o  “patagonia argentina”. El mundo viene a visitar un selva valdiviana en la Patagonia austral, dividida por límites políticos que fueron creados hace escasamente 200 años. Pero esa mirada externa nos hace considerar que esta unidad, esta población en un espacio reducido, tiene una entidad propia que no hemos sabido valorar oportunamente

De la misma manera podemos hablar de la “Puna”, donde tenemos una geografía compartida por cuatro países (Argentina, Bolivia, Perú, Chile) con una población de origen ancestral que esta reconocida por el turismo internacional pero no por nosotros. Para nosotros, argentinos, la Puna termina en Jujuy, pero en realidad una mirada extranjera la ve como una unidad, y debemos saber reconocer esas diferencias para poder potenciarlas.

Uno de los inconvenientes que se nos presenta, pero que será finalmente una ventaja comparativa es que, en los países iniciales del MERCOSUR se hablan dos idiomas, en una primera visión, se habla 60 % portugués y 40 % español, pero además existen otros idiomas que se están incluyendo. Por ejemplo: se habla el guaraní en una zona que no es exclusivamente la de la división política: República de Paraguay; sino que incluye sur de Brasil, Argentina, Paraguay y Bolivia.

Felizmente a medida que vamos promoviendo y obteniendo resultados de la interacción de los individuos, de la sociedad civil, de nosotros, estamos generando un nuevo idioma el “portuñol”. En esto estamos sacando ventaja a otra regiones a las cuales les ha costado muchísimo adaptarse y poder comprender la visión del otro.

Entonces, lo que recibimos, unas veces como cuestionamiento y otras como consultas ¿Como podemos superar este encasillamiento, este colectivo que nos han generado; ”somos todos MERCOSUR”, si no se respetan nuestras diferencias? Tiene una sola respuesta: participando. Teniendo una actitud proactiva para lograr la integración. ¿Como? Reconociendo primero al otro, conociéndolo, sabiendo como piensa; conociéndolo, lo vamos a respetar; debemos exigir lo mismo. Una vez que se establece ese nivel de respeto, sí se puede pensar en crear un asociación que nos lleve a superar estas limitaciones que inicialmente nos parecen infranqueables.

El Embajador Varsky nos indicó algunos de los canales de integración que ya están abiertos, están funcionando, y la sociedad en su conjunto desconoce. No porque no se haya dado la publicidad que corresponde, los medios oficiales lo hacen; sino porque los medios masivos de comunicación no levanta la información porque, a veces, consideran que va en contra de lo que la opinión pública pretende. Y en realidad, así están modificando la opinión pública.

Los cauces de participación, de integración están abiertos, son caminos que aceptan desde la participación individual, la participación de organizaciones sociales, de cámaras empresarias, de pequeñas y medianas empresas, de las grandes empresas por cierto, fueron las que más rápidamente entendieron este desafío. Pero los canales de participación están abiertos tenemos que buscarlos, es en beneficio propio que lo hacemos.

Hemos acordado con el Embajador Varsky incorporar al site del Instituto Jurídico Modelo, los enlaces que permitan acceder a estos canales de comunicación que me estoy refiriendo. Si no lo hacen los medios de comunicación masivos, pues bien, empecemos a hacerlo nosotros.

Esta forma de integración nos asegurará que MERCOSUR está en buen camino y nos va a permitir controlar que los beneficios que MERCOSUR propone cuando dice que “decide la unión para mejorar la competitividad y mejorar así el nivel de vida de los habitantes de la región”, se va a concretar.

Desde el Instituto Jurídico Modelo estamos convencidos que esto es así. Hace diez años que comenzamos con esta interpretación. Analizamos otras posibilidades de integración regional, y concluimos al igual que el Embajador Vieira, en que: Si no es MERCOSUR es ALCA y ALCA no nos permite identificarnos, reconocernos, valorarnos y potenciarnos. ALCA no es beneficio para nosotros

En el beneficio de la región, por supuesto que van a haber ganadores y perdedores que pueden superar sus diferencias con una propuesta integradora, que pueda reconocer cuales son aquellas capacidades que pueden faltar en alguna empresa en algún país, que lo tiene otro, complementarse, potenciarse y asi enfrentarnos al mundo de una manera diferente.

Pero no tenemos que esperar que desde los Estados, desde estas instituciones formales sobre las que vamos a dedicar un corto párrafo, nos indiquen cual es el camino y nos lleven de la mano.  

MERCOSUR es Participación. Participación de empresas, participación de Organizaciones intermedias y participación de los individuos. Nosotros podemos recorrer con libertad MERCOSUR. No hay barreras que nos lo impidan ahora. Los trabajadores pueden rotar posiciones de trabajo, su beneficio jubilatorio les va a ser reconocido, independientemente del país MERCOSUR donde haya realizado su esfuerzo laboral.
 
La mayoría de la población civil lo desconoce todo esto, pero no porque no este vigente, no porque no se pueda utilizar, sino porque así como nosotros estamos convencidos que MERCOSUR es la salida de la región, hay otros intereses que pretenden hacer que esta idea, que este proceso de integración fracase. Fracase una integración económica, fracase una integración intelectual, que no tengamos pensamiento propio. Todas esas ideas son las que nos están minando.

Y por otra parte tenemos esta otra oportunidad que está vigente, que está funcionando, y que debemos alentar ¿Cómo? Participando.

Para cerrar. Tenemos algunas cuestiones por las cuales descreemos de esto que estoy comentando. Es el problema de los liderazgos

En la región tenemos liderazgos que no se han comprometido con los objetivos que declaman, no hay un compromiso de vida, testimonial, de querer lograr el objetivo, todo lo contrario, es: Hagamos la guerra y vayan.

Ese descreimiento de la sociedad civil, por supuesto que también esta afectando a lo que puede ser el mayor desarrollo de MERCOSUR.
La única forma en que podemos evitar que esto ocurra, es participando. Nadie va a defender los intereses personales mejor que cada uno de nosotros.

Por supuesto que debemos organizarnos. Los caminos, las estructuras, los canales de comunicación están vigentes. La ruta está, hay poco tránsito, tenemos que llenarla. Posiblemente encontremos después otro camino, pero este que tenemos ahora, es el mejor posible.  

La exhortación entonces para cerrar es:  

Sociedad Civil, amigos: Participemos. MERCOSUR nos necesita, y nos merecemos un MERCOSUR.

Nada más













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